Toca hacer balance de la temporada una vez
terminada y la sensación final es que pese a que se ha terminado haciendo muy larga los resultados han sido satisfactorios y podemos darnos por
satisfechos con una sonrisa en la boca.
El reto esta temporada se presentaba
apasionante tras lo logrado en la anterior, con la gesta conseguida de ganar la
liga ante los todopoderosos Madrid y Barcelona con ese último gol de Godín en
el Nou Camp que nos hizo ser las personas más felices del mundo a los
atléticos en esos momentos posteriores a lograr el título de liga, aunque tengo
la sensación de que viendo como este entrenador y estos jugadores dignifican
esta camiseta seguiremos sintiéndonos los más felices del mundo durante mucho
tiempo.
La primera prueba de fuego de la temporada
sería la Supercopa de España frente al Real Madrid en lo que la prensa quiso
ver como una oportunidad de revancha atlética tras la final perdida de la
Champions en Lisboa, pero nada más lejos de la realidad, esa revancha solo nos
la podremos tomar en otra final de Champions contra ellos si alguna vez mas se
vuelve a presentar la ocasión. Se ganó la Supercopa llevando otro título más a
las vitrinas del club y durante la primera mitad de la temporada se siguió
viendo a un equipo aguerrido que competía cada partido a morir y los resultados
eran óptimos, en los puestos cabeceros de la liga y clasificados para octavos
de la Champions como primeros de grupo. Pese a las numerosas bajas y las muchas
altas, la mayoría de las cuales se acoplaron bastante bien al equipo (aunque
dignos de estudio serán el tema del lateral izquierdo con Siqueira, un desaparecido
desde noviembre Ansaldi y que un tipo como Raúl Jiménez haya tenido la suerte de
vestir esta camiseta con el pobre nivel de juego que ha mostrado), Moyá cumplía
como portero titular y Mandzukic en estos primeros meses de competición hacía
goles en todas las competiciones y cada día se compenetraba con un Griezmann
que fue ganando peso en el equipo con el paso de los meses.
La segunda mitad de temporada, en especial
tras el histórico 4-0 que le endosamos al Real Madrid en liga y la agónica
victoria por penaltis en los octavos de final de Champions empezó a hacerse
larga. El medio campo, uno de los ejes fundamentales de la temporada pasada
mostraba una alarmante falta claridad de ideas y frescura que se iba acrecentando cada
partido, y esto hacia que el juego de otros jugadores se viera afectado ante la
falta de balones que les venían surtidos de jugadores como Arda o Koke, muy lejos
de sus mejores versiones en los últimos meses, y uno de los más perjudicados de
ello y al que creo que se le ha criticado de manera excesiva e injusta ha sido
Mandzukic, que no ha marcado desde marzo, pero hay que ver cuántos balones en
condiciones le han llegado, bien poquitos. El equipo se mantuvo y consiguió
llegar al final de temporada en condiciones de cumplir el objetivo de acabar
entre los tres primeros gracias a los goles de Griezmann y alguno que otro de
Torres, que tras volver al Atlético en enero y tener unas actuaciones ligueras
sin mucha suerte de cara al gol durante una gran cantidad de partidos terminó
la liga marcando 2-3 goles que ayudaron mucho al equipo a acabar en la tercera
posición. Y también ayudó la aparición de Oblak tras la lesión de Moyá contra el Leverkusen, que con grandes paradas en un buen numero de partidos consiguió amarrar puntos importantes para las arcas rojiblancas.
En Copa del Rey el equipo cayó en cuartos de
final contra el Barcelona tras eliminar en octavos al Real Madrid, y el propio
Real Madrid nos eliminó en los cuartos de final de la Champions en una
eliminatoria donde muchos nos quedamos con la sensación de que se pudo hacer mas,
pero volver a estar entre los ocho mejores equipos de Europa por segundo año
consecutivo y volver la temporada que viene por tercera temporada consecutiva
(nunca se había logrado antes en la historia del club) la Champions es sin duda
para sentirse más que satisfecho.
Así que recopilando hemos ganado la Supercopa
de España, hemos acabado terceros y vamos directos a la Champions y en Copa y
Champions League nos eliminaron los dos equipos más poderosos del mundo, sin
duda, muchos equipos querrían estar en nuestro lugar. La temporada que viene
Dios dirá, pero saber que el Cholo seguirá ahí es garantía de que podemos estar
tranquilos y seguirá manteniendo a los jugadores implicados en el equipo al
100%, que es lo importante.
Hasta mas ver.
