El Atleti cierra una de sus temporadas mas gloriosas con un título liguero, un subcampeonato de Europa y la sensación de haber vuelto a ser un equipo como hacía años que no era. Simeone ha conseguido que el compromiso de los jugadores de este equipo no pueda igualarse y la afición pueda volverse a sentir orgullosa de unos jugadores que hace no mucho estuvieron luchando por no bajar a Segunda División. No te vayas nunca Cholo.
Se acabó la temporada 2013/2014, de manera dolorosa tras lo sucedido anoche en Lisboa donde estuvimos rozando la Champions League hasta que el cabezazo de Sergio Ramos y la posterior prórroga acabó por despertar a todos los rojiblancos del inesperado sueño a principio de temporada de lograr la primera Copa de Europa, pero sin duda esta temporada será siempre recordada como la temporada en la que volvimos a ser Campeones de Liga tras 18 años de sinsabores ligueros (descenso a Segunda incluido), como la temporada en la que la filosofía del "partido a partido" a pasado a ser una especie de religión para los aficionados atléticos y en la que los que profetizaban el "ya caerá el Atleti" se han tenido que tragar sus palabras jornada tras jornada.
Soy el primero en reconocer que si cuando empezó la temporada en agosto alguien me hubiera dicho que mi equipo iba a llegar a la final de la Champions e iba a ser campeón de liga le hubiera dicho que se dejara de cachondear de mi y que siendo realista me conformaba con acabar terceros en liga (que por presupuestos es donde nos corresponde) y haber dado una buena imagen en Europa llegando tranquilamente a cuartos de final. Como me alegro haberme equivocado. No es porque no confiara en los jugadores y en el entrenador, que ya demostraron el año pasado que son capaces de ganar a cualquiera como se vio en la final de la Copa del Rey que ganamos al Madrid, pero siendo realistas jamás podía imaginar que podriamos aguantarles 38 jornadas a los dos equipos ricos de esta liga. Ganarles no ha sido un milagro, pero si una auténtica heroicidad que probablemente no se vuelva a repetir (o sí, quien sabe).
Sin duda haberles cerrado la boca a toda la prensa madridista y catalana es un lujazo del que debemos sentirnos orgullosos, ya que si los primeros suspiraban por el triplete blanco con portadas vergonzosas como la que sacó La Razón hace no mucho los segundos se veían campeones antes de la última jornada teniendo aún que jugar contra nosotros. Joderos vivos que os hemos tenido que hacer cambiar muchas portadas ratas inmundas.
Y por supuesto, hemos demostrado lo que muchos no nos han demostrado, un respeto infinito cuando nos ha tocado saborear el mal trago de la derrota. Desde el momento en que pitó el final el árbitro solo pude observar a jugadores, entrenador y afición atlética aplaudir al rival y felicitarles por el triunfo. Hace poco mas de un año un entrenador impresentable y un jugador egocéntrico (Mourinho y Cristiano Ronaldo para el que todavía no sepa de quien hablo) demostraron que no saben perder cuando se quedaron en los vestuarios mientras nos daban el trofeo de la Copa del Rey, demostrando un señorio "indigno" del club al que representaba el entrenador portugués en ese momento y al que sigue representando el musculoso jugador luso. Anoche ese mismo jugador, tras realizar un partido donde pasó durante 119 minutos totalmente inadvertido gracias a la enorme defensa que ejercieron contra él los jugadores atléticos demostró que tampoco sabe ganar cuando celebró su "importantísimo" gol del 4-1 como si él solito hubiera sido el artífice del triunfo y estoy todavía esperando a saber que pensó cuando vio que todos sus compañeros pasaron olímpicamente de su show mostrando musculitos y guiñando ojitos a la cámara.
Los madridistas se sienten orgullosos de haber ganado su obsesiva décima, mientras tanto los atléticos nos sentimos orgullosos de unos jugadores que se han dejado el alma en el campo, que han sido capaces de luchar hasta el último minuto pese a estar casi sin poder moverse en el campo y que no han huido como cobardes por haber perdido. Aún a riesgo de que me llamen perdedor yo sin duda prefiero esto último que tener que sentir vergüenza de vez en cuando por el comportamiento impropio de un deportista de élite como los que arriba he contado por muchas copas de Europa que gane. De hecho si algún día veo a mi equipo cachondearse de un rival, irse del campo sin felicitar a un equipo que le haya ganado o celebrar algo faltándoles el respeto al rival seré el primero en recriminarselo.
Si en algo se ha convertido el Atleti este año para el resto del mundo es en un ejemplo deportivo de compañerismo, compromiso, entrega y sacrificio. Otros jamás comprenderán lo que significan esas cuatro palabras. Por mucho que muchos farden de ser los reyes, les aseguro que el sentimiento de ser del Atleti supera eso y con creces, y sin necesidad de ganar ni presumir tanto. En la vida hay muchas mas importantes, esto es solo es fútbol, y sin duda me alegro de no haber elegido en su momento la forma fácil de ser seguidor de fútbol sino haber elegido la mas sufridora y pasional, no se porqué pero a mi me pone mucho mas, creo que las victorias se disfrutan mucho mas aunque sean mas escasas, y las derrotas aunque son dolorosas siempre tienen algun detalle que hace que te sientas orgulloso de tu equipo pese a la derrota. Y en cuanto a afición ahí lo tengo muy claro, ganamos a cualquier equipo por goleada.
Por todo esto que han demostrado mis jugadores a lo largo de todo este año no puedo sentirme mas orgulloso de ser hincha del Atlético de Madrid, y a mucha honra.
Hasta mas ver.
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